¿Cuáles son las aves ratites?

Al escuchar hablar sobre aves ratites, muchos pueden pensar que son especies tan exóticas que jamás hemos visto un ejemplar. Si bien este grupo abarque pocas especies, la mayoría de nosotros conoce a alguna ave ratite. Generalmente, halamos de aves de porte grande que no son capaces de volar, pero corren con extraordinaria agilidad. Y si piensas inmediatamente en un avestruz, estás en lo correcto. Los avestruces son las aves ratites más famosas a nivel global. Pero a continuación, te proponemos conocer otros miembros de esta peculiar familia. ¿Te animas?

¿Cómo se caracterizan las aves ratites?

Las ratites pertenecen a un orden llamado Struthioniformes, que reúne a unas 50 especies aves paleognatas (muchas ya extintas). Se caracterizan por la presencia de un esternón plano, sin la quilla donde se insertan los músculos que permiten a otras aves volar.

Por este motivo, las aves ratites suelen tener plumas atrofiadas y difícilmente utilizan sus alas. De hecho, la gran mayoría es incapaz de volar y sus alas son pequeñas en comparación con el tamaño de su cuerpo. Por otro lado, desarrollan mejor los músculos y demás estructuras de las patas, siendo capaces de correr más rápido que las demás aves.

Sin embargo, no todas las ratites son incapaces de volar. Los tinamúes, por ejemplo, mantienen cierta capacidad de vuelo, aunque sus estudios genéticos comprueban que pertenecen al orden Struthioniformes.

Ejemplos de aves ratites

Avestruz

Los avestruces son, probablemente, las aves ratites más famosas y llamativas a nivel global. No solo por su gran tamaño y musculatura desarrollada, sino también por su peculiar aspecto con el cello pelado y su extraordinaria habilidad de correr.

Estas aves son originarias del continente africano, y actualmente se reconocen tres especies distintas. A pesar de no poder volar, sacan mucho provecho de sus alas. Además de darles mayor equilibrio al correr, también las usan como mecanismos de defensa.

Emú

Los emúes ocupan el segundo puesto entre las aves ratites, tanto por su tamaño como por su popularidad. Originarios de Oceanía, pueden alcanzar los 1,80 metros de altura y pesar casi 100 kilos. Su población se extiende por las áreas menos pobladas del continente, pudiendo habitar en bosques, estepas y desiertos.

Por lo general, son muy tranquilas y se desplazan de forma lenta en su territorio. Pero al percibir cualquier peligro, pueden alcanzar fácilmente los 75 kilómetros por hora al correr.

Ñandú

Los ñandúes son las aves ratites sudamericanas, habitando principalmente en las pampas de este continente. Se diferencia del avestruz por la menor talla, el cuello con plumas y la presencia de tres dedos en cada pata.

Para alcanzar mayor velocidad al correr, los ñandúes suelen levantar un ala, que actúa de forma similar a la vela de un barco. A pesar de estar muy alerta y mostrarse algo desconfiados en la presencia humana, son aves muy sociables. De hecho, comparten territorio y hasta se mezclan con guanacos, ciervos y otras especies.

Kiwi

El ave símbolo de Nueva Zelanda es una ratite, a pesar de ser mucho más pequeña que los demás representantes. Los kiwis tienen un tamaño similar a las gallinas y difícilmente superan los 40 centímetros de altura. Una curiosidad es que los huevos son relativamente grandes en comparación con el tamaño de la especie.

Casuario

Para muchos, los casuarios son los representantes más bonitos de la familia de las aves ratites. A pesar del cuerpo predominantemente negro, muestran llamativas tonalidades azuladas, rosadas y rojizas en su cuello, cabeza y topete.

Aunque sean pequeñas y muy atractivas, los casuarios muestran un carácter algo arisco y agresivo, diferenciándose de las demás especies. Actualmente, habitan en Australia y parte de la isla de Nueva Guinea.